8 filmes imprescindibles de Michael Haneke
El apellido del director y guionista austríaco Michael Haneke, nacido el 23 de marzo de 1942, ocupa uno de los lugares más preciados en los anales del cine mundial.
Su profundo conocimiento de la condición y la psicología humanas lo vuelven uno de estos directores-cirujanos que con su lente y sus historias diseccionan lo que somos. El propio Haneke lo ha dicho en entrevistas de la siguiente manera:
“Mis películas están hechas como estatutos políticos en contra del cine ‘facilón’ americano; pretendo que sean un desempoderamiento del espectador. Con mis filmes pretendo apelar a un arte que plantea preguntas, en lugar de falsas respuestas: cine que clarifique la distancia, en lugar de violar la cercanía; que provoque conflicto, y luego diálogo, en lugar de consumo y consenso”.
Su pasión por el cine lo ha llevado a dirigir 12 filmes, de los cuales hemos curado una lista de ocho imprescindibles. Conócelo más a fondo a continuación:
The Seventh Continent (1989)
Se trata del debut de Haneke, basada en una supuesta historia real de una familia clase mediera austríaca cuyos miembros, un día, sin razón aparente, decidieron quitarse la vida.
Se trata de un retrato brutal de la clase media y de las espadas de Damocles que penden sobre su vida aparentemente segura. Dividida en tres partes, las dos primeras representan un día en la vida de esta familia, cada uno en 1987 y 1988. La tercera inicia cuando dejan el departamento de los abuelos después de una visita, y culmina con el suicidio de sus tres miembros.
Este film fue seleccionado como la primera candidata representante de Austria en la ceremonia número 62 de los Premios de la Academia, pero no fue seleccionada. Ganó el Leopardo de Bronce en el Festival Internacional de Cine de Locarno.
Funny Games (1997)
La cuarta película de Haneke es quizá la más brutal de toda su filmografía. La premisa es muy simple: dos jóvenes vestidos de golfistas arriban a la casa de descanso de una acaudalada familia austríaca. Se presentan como vecinos, y después de charlar amablemente con ellos, los vuelven sus rehenes.
Todo el film se desarrollará dentro de la casa, y mostrará sin filtros los brutales juegos sádicos de estos dos golfistas, que no se detendrán hasta haber asesinado a los tres miembros de la familia. En un principio Haneke quiso hacer la película en Estados Unidos, pero por cuestiones presupuestales y de logística tuvo que hacerla en Austria.
Con un brutal soundtrack del saxofonista y compositor americano John Zorn, Funny Games es un retrato descarnado del absurdo, la violencia y la crueldad. Todos temas centrales en la obra de Haneke. Debutó en el Festival de Cannes de 1997, y diez años después el propio Haneke dirigió un remake estadunidense con Naomi Watts.
Code Unknown (2000)
Un film portentoso, inaugural del nuevo siglo. Su narrativa aparénteme inconexa va uniendo a lo largo de sus 120 minutos los destinos de cuatro personajes, a través de un código que no se percibe a primer golpe de vista, pero que está ahí.
Para la crítica en su momento, Code Unknown fue una pieza de alta manufactura que desplegó los poderes de Juliette Binoche como actriz; pero resultó también críptica y desconcertante. “Una pieza para intelectuales”, se decía de él.
Con esa rara sensibilidad oscura, Haneke compitió en la edición 2000 del Festival de Cannes… su fotógrafo, Jürgen Jürges, fue nominado para la Rada de Oro en el certamen Camerimage.
The Piano Teacher (2001)
Fue la película que puso el nombre de Haneke en el mapa; y el que le dio a Isabelle Huppert “la interpretación máxima de su carrera”.
Basada en la novela del mismo nombre de Elfriede Jelinek, retrata la vida silenciosa y desesperada de Erika Kohut, una profesora de piano en el conservatorio de Vienna. A sus cuarenta años, Erika vive aún con su madre en un entorno asfixiante, que abre puertas oscuras en su psique. A través de esas puertas entrará un joven estudiante, y pronto ambos tendrán una relación erótica intensa. Sin embargo, pronto se conviertirá en un tormento en donde el poder y la humillación tienen la misma importancia que el orgasmo.
Arrasó en la edición 2001 del Festival de Cannes: ganó el Gran Premio de Jurado, el de Mejor Actor y Mejor Actriz para sus protagonistas Isabelle Huppert y Benoît Magimel.
Caché (2005)
Como ya lo habíamos escrito, esta es una de las mejores películas del siglo XXI que fueron ignoradas por la Academia de Cine estadunidense; pese a tener todos los elementos para hacerse con el premio a Mejor Película Extranjera, no lo consiguió.
Se trata de un thriller psicológico que sitúa a Georges en medio de una situación de acoso: en su correo, Georges, de oficio periodista, empieza a recibir videos rodados en la calle en donde aparece él con su familia (otra vez una familia de tres miembros).
No conoce quién los filma ni por qué los manda, pero a medida que esos videos se van volviendo más íntimos, la desesperación de la familia llegará a niveles máximos, y todos sus secretos llegarán a la superficie. Ganó cuatro premios en el Festival de Cannes 2006: Mejor Director, la Palma de Oro, el premio FIPRESCI y el Ecuménico del Jurado.
The White Ribbon (2009)
Ubicada en los albores de la primera guerra mundial, esta pieza maestra de Haneke, filmada totalmente en blanco y negro, retrata la vida de una pequeña comunidad al norte de Alemania que se ve amenazada por una extraña serie de acontecimientos violentos, y los niños están involucrados de alguna manera.
Debutó en la edición 2009 del Festival de Cannes, en donde se hizo acreedora a la Palma de Oro, y a otros tres premios más en el mismo festival. Fue nominada al BAFTA de Mejor Película Extranjera, y a los Premios Óscar para Mejor Cinematografía y Mejor Película Extranjera.
Una de las mejores películas del director.
Amour (2012)
Escrita y dirigida por el austríaco, ésta fue su película que logró, de lejos, más premios y clamores de la crítica. Fue, por decirlo de alguna manera, su consagración a nivel mundial. Se trata de un demoledor drama en donde dos ancianos luchan contra una enfermedad.
Jean-Louis Trintignant interpreta a Georges Laurent, Emmanuelle Riva a la esposa de éste: Anne. Ambos ancianos viven solos en París, y un día Anne sufre una conmoción: se queda en estado catatónico, sin responder al desesperado Georges. Esta escena es el primer síntoma de una brutal enfermedad que le arrebatará todo a Anne, y Georges tendrá que cuidarla. Un profundo análisis del amor entre dos viejos, y todo lo que tiene alrededor incluido su ingrediente de crueldad, de compasión y miedo.
Ganó una veintena de premios y fue nominada a otra decena; entre los más destacados, fue ganadora del Óscar y el Globo de Oro como mejor película extranjera; en la edición 25 de los European Film Awards, ganó en cuatro categorías, incluida mejor película y mejor director; en los César Awards fue nominada a diez categorías: ganó en cinco. También, Emanuelle Riva se convirtió en la mujer más vieja en ganar un BAFTA.
Happy End (2017)
El corte más reciente del austríaco; a diferencia de su antecesora, pasó un poco sin pena ni gloria. Lo destacado en este film son las nuevas técnicas de filmación que utiliza Haneke, como la filmación con teléfonos móviles.
Podría tratarse de una secuela de Amour, en algún sentido: Jean-Louis Trintignant interpreta nuevamente a un George Laurent, un viejo que sucumbe lentamente en la demencia. Sus hijos, Thomas y Anne, junto con sus respectivas familias, viven en la mansión del viejo. Una serie de problemas laborales y amorosos pondrá a prueba la estabilidad mental de toda la familia, y sacará a la superficie todos sus secretos.
Debutó en la más reciente edición del Festival de Cannes: para algunos críticos fue “una película deslumbrante”, mientras que otros la calificaron como “un regreso a terreno conocido por parte de Haneke”. Respecto a su estilo, en medios como The Telegraph, se dijo que “es menos acumulativo y más suelto que nunca. La película se niega a caer en definiciones facilonas, y a complacer a la audiencia, que insiste en no aceptar, o aceptar incómodamente, la parte oscura de la condición humana”.