“Gracias a Dios”, la cinta que expone el abuso sexual a más de 70 niños
¿Qué puede ser peor que abusar de la inocencia de un niño?, ¿Cuál es la peor manera de destruir la infancia de una persona y, de paso, traumatizarlo de por vida? El abuso sexual, si bien es un hecho atroz, es algo todavía más monstruoso cuando las víctimas son infantes, criaturas que desde sus primeros años son obligados a conocer la perversidad del mundo. Por ello la controversial película Gracias a Dios se estrena finalmente como una manera de darle voz a todos aquellos que han tenido que callar durante años esta violencia.
El director François Ozon estrena esta cinta basada en un caso de pedofilia ocurrido en Francia entre 1980 y 1990, en el que el cura Bernard Preynat abusó sexualmente de más de 70 niños bajo la protección de la iglesia.
En esta historia, Alexandre (Melvil Poupaud) vive una vida tranquila en Lyon con su esposa e hijos, al menos hasta que se entera que el sacerdote que abusó de él cuando era un boy scout sigue trabajando con niños, por lo que decide unirse con François y Emmanuel (Denis Ménochet y Swann Arlaud), otras víctimas del cura, para enfrentar al hombre que destruyo sus vidas. Sin embargo, sus declaraciones tendrán serias repercusiones para todo mundo.
Según su director, la película surge como una manera de mostrar la fragilidad masculina y todos los obstáculos que los hombres deben soportar cuando han sido víctimas de violencia sexual, por lo que cuando el cineasta conoció los testimonios de quienes fueron violados por Preynat encontró una manera de contar la historia que quería mostrar y además darle voz a quienes sufrieron el tormento en carne propia.
Fue a través de las declaraciones de la asociación La Parole libérée, creada en 2015 por las víctimas de abuso, que el director profundizó en el asunto y se puso en contacto con Alexandre, uno de los niños que fue violado. Además, gracias a esto pudo acceder a diversos archivos entre fotografías, declaraciones y grabaciones en las que se detallaba el caso.
Sin embargo, a pesar de contar con todas las pruebas y el material suficiente para filmar un documental, se decidió por la ficción con tal de dar mayor comodidad a las víctimas, pues éstas ya habían sido objeto de entrevistas y reportajes durante muchos años, además fueron ellas mismas quienes solicitaron que su caso se mostrara como un largometraje, pues ello les daba más seguridad y pensaron que era una forma en la que su voz podría llegar a más personas.
Sin embargo Ozon explica que no por ello la película deja de ser verídica en su mayor parte, sino que al contrario, cuenta con una gran fidelidad a los hechos (siendo los apellidos de los protagonistas una de las pocas cosas que fueron modificadas), pues al convertir la historia en película el director se vio obligado a elegir mejor el material con el cual quería trabajar y que, en el menor tiempo posible, contará todo el caso completo de las víctimas.
Gracias a esta elección es que pudo crear una película más personal e íntima, pues al alejarse del documental, y por ende de todo lo ya contado por los medios de comunicación, se pudo profundizar mejor en las declaraciones y vivencias personales de los hombres que fueron abusados, a la par que el mundo puede conocer más a fondo el surgimiento de la asociación La Parole libérée, que fue tan importante para este hecho.
Por otro lado explica que Gracias a dios no es un filme que intente ir contra la iglesia –así como tampoco lo hacen las declaraciones verdaderas–, sino más bien en su apoyo, para depurar lo malo en ella mediante las contradicciones y las complejidades que este caso sacó a la luz.
La película también se encarga de demostrar otro punto que no suele ser abordado por los mass media como lo es la familia, ya que el filme demuestra que las declaraciones de los hombres no sólo afectan a sus acusadores, sino también a ellos mismos y a sus propias parejas, hermanos e incluso hijos.
Así, Ozon espera que este proyecto no sólo sea una cinta que exponga la verdad de las víctimas y la pedofilia que se vive dentro del clero, sino que funja como una reflexión para la iglesia misma en al que puedan reconocer y comenzar a arreglar los errores en los que ha caído la institución.
El caso Preynat
Bernard Preynat fue acusado y puesto bajo supervisión en enero de 2016 por presuntamente haber abusado sexualmente de más de 70 niños, aunque actualmente su caso no ha sido resuelto jurídicamente, sino que se está en espera de que se fije una fecha para su juicio, motivo por el cual hoy en día permanece bajo calidad de inocente; aunque eclesiásticamente ya fue destituido.
Esto último ha sido causa de polémica para el estreno de esta película, pues los abogados de Preynat afirman que el lanzamiento de Gracias a Dios podría perjudicar a su cliente mientras su situación legal no se resuelva.
Además de Preynat, actualmente el cardenal Barbarin, Régine Maire y otros cinco miembros de la iglesia comparecieron ante el tribunal en 2019 por no revelar la agresión sexual a los menores ni brindarles asistencia.
Gracias a Dios estrena este 12 de septiembre en Perú en los complejos Cineplanet.