«No Sudden Move»: un atraco de mediano éxito
Algo que ya es moneda común en el cine de Steven Soderbergh es su manejo de un gran cast (La Gran Estafa o Contagio). Ahora regresa junto a varios colaboradores antiguos y algunos nuevos para contar una clásica historia de crimen en No Sudden Move. Y como es ya usual en su cine, se va con todo ante el sistema. Es curioso que por hacer antes estas historias que se solían caracterizar por planes “perfectos”, esta ya desde su concepción plantee que todo saldrá mal.
Como acierto se diría que el guion funciona en gran medida. Tiene la capacidad de generar el interés suficiente para saber hasta dónde son capaces de llegar por sus fallas. La narrativa extiende muchas ramas en torno a este trabajo delincuencial que a simple vista parece fácil. No obstante, como si de una bola de nieve se tratara, esta va cayendo haciéndose cada vez más grande.
El tema es ¿Son realmente todas estas ramas bien desarrolladas? Pues entre que sí y que no. Hay momentos en que el exceso de personajes y situaciones de las cuales se van conociendo en la marcha hacen que seguir el ritmo no sea tarea fácil. Es esa innecesaria complejidad de líneas narrativas lo que le resta puntos, mas no derrumba todo. De todos modos sus ágiles diálogos y otros momentos mejor estructurados en el suspenso compensan bien.
Las actuaciones son lo más sólido de la cinta. Soderbergh tuvo la suerte de contar con un reparto lo suficientemente carismático para sobrellevar una narrativa pesada. Claro que el mismo guion no les dio a algunos el tiempo suficiente de brillar. Pero incluso hasta en los roles no tan grandes (como el de un retornante Brendan Fraser) da gusto verlos en pantalla. De todos, Benicio Del Toro sería quien más destaque, sobre todo por acomodarse a la perfección al estilo que se proponía, pareciendo incluso un personaje sacado directamente de un film noir de aquella época.
No Sudden Move, a pesar de su narrativa por momentos pesada, llega a ser en suma una cinta entretenida. Es lo mejor que el director ha hecho estos últimos cinco años y resulta un buen homenaje al cine de crimen del Hollywood de antaño.
La película se encuentra actualmente disponible a través de HBO Max