“Searching”, una oscura búsqueda llena de desesperación y angustia

En esta vida hay dolores tan grandes que simplemente debe ser imposible entenderlos a menos que se hayan experimentado en carne propia, y seguramente uno de los más grandes es el no volver a ver a un ser amado tras su desaparición, pues la incertidumbre de no saber si ha ocurrido lo peor o si algún día volveremos a encontrarlo debe ser un infierno indescriptible. Sin embargo, ¿qué pasa cuando esa persona de la que de pronto ya no se tienen noticias es un niño?, o más aún, ¿qué ocurre cuando ese niño puede ser nuestro propio hijo o hija? Para darnos una idea de esto, el director Aneesh Chaganty nos presenta Searching (Buscando, 2018), un impactante thriller psicológico que llevará a tu mente al límite.

David Kim (John Cho) es un amoroso padre quien junto a su hija Margot (Alex Jayne Go) afronta la muerte de su esposa. Sin embargo, las cosas se pondrán turbias cuando la adolescente desaparece sin razón alguna, por lo que el hombre deberá comenzar una búsqueda en las redes sociales de la joven para encontrar pistas que lo ayuden a localizarla, aunque lo que descubrirá en internet le demostrará que su hija no era la persona que él pensaba.

Searching es una película desgarradora que mantiene al espectador pegado a la pantalla debido a la montaña rusa de emociones que representa, pues si bien al comienzo de la historia sólo vemos a un hombre viudo que únicamente busca proteger a su hija, conforme la trama avanza seremos testigos de distintos giros de tuerca y situaciones bastante turbias que nos indican que todas las familias guardan secretos pero, sobre todo, nos enseña que los padres nunca llegarán a conocer del todo a sus hijos.

Ahora bien, antes de continuar es preciso decir que toda la película ocurre como si la estuviésemos mirando mediante pantallas de celular y computadoras, por lo que las situaciones se presentan única y exclusivamente a través de cámaras web, monitores de pc o algunos televisores.

Este recurso se mira desde los primeros minutos, cuando vemos varios clips de video y fotografías en los que David, su esposa Pamela (Sarah Sohn) y su hija Margot se miran como una familia feliz, aunque por desgracia la secuencia culmina con el fallecimiento de la madre, por lo que desde un inicio la cinta se enfoca en la relación padre-hija. Ahora bien, lejos de que la muerte de la esposa sea un inconveniente al llegar de forma tan prematura en la trama, esto se vuelve el punto clave en la cinta al ser el factor que causa la inestabilidad entre David y su hija.

Esta inestabilidad de la que hablamos se percibe apenas Margot desaparece, pues conforme pasan las horas sin que su padre sepa nada de ella, se da inicio a una búsqueda implacable vía Facebook y otras redes sociales que revelarán una serie de secretos que no sólo dejan en claro que la adolescente tiene serios daños psicológicos y sociales, sino que también oculta una vida privada de la que nadie sabe nada.

Estos hechos ocasionan que uno fácilmente comience a preguntarse si la mujer es una víctima o si en realidad todo fue una maquinación suya, un panorama que se volverá todavía más turbio cuando entre en escena la detective Rosemary Vick (Debra Messing), cuyas investigaciones arrojarán resultados todavía más mórbidos pero que, además, harán que las cosas se enreden todavía más.

Es gracias a las labores detectivescas en conjunto entre David y la detective Vick que poco a poco se va resolviendo el misterio, aunque para llegar a la solución final primero deberán enfrentarse a varias situaciones bastante retorcidas. Sin embargo, son estos eventos los que hacen que Searching se desarrolle en una atmosfera totalmente envolvente, pues cada vez que parece que se ha llegado a una resolución, ocurre algo que viene para cambiar totalmente el rumbo de las sospechas, por lo que podríamos decir que se trata de una historia donde todos pueden ser responsables de la desaparición.

Otro de los grandes puntos de Searching es que funciona como un retrato de nuestra cruel realidad, y no sólo por tratar el hecho de las desapariciones, sino por mostrarnos todo lo que ocurre alrededor de la vida de alguien que está pasando por una situación tan lamentable. Además, si a esto agregamos el amarillismo de los medios de comunicación y la desinformación que se genera en internet, en donde prácticamente cualquiera puede difundir información falsa o decir lo que quiera, entonces estamos hablando de una película totalmente desgarradora por cuanto más apegada está a nuestro mundo.

Y es que conforme la desaparición de Margot se vuelve más turbia, también veremos a personas que se intentarán aprovechar de esta situación con tal de obtener un poco de fama, lo cual deja en claro la podredumbre y la falta de sensibilidad con la que cuentan algunos seres humanos en esta época donde unos cuantos “likes” o “followers” valen más que la verdad.

Por supuesto, la película también sirve para exponer algunos problemas familiares, sobre todo los que tienen que ver con la falta de comunicación entre los mismos padres e hijos, pues como dijimos antes, las investigaciones de David lo harán abrir los ojos al percatarse que su hija lleva una vida oculta totalmente contraria a los valores que le enseñó, a la vez que él mismo se percatará de los errores que ha cometido como padre.

En cuanto a los puntos débiles de la trama, entre los pocos con los que cuenta está el de tener demasiados giros inesperados, y no porque estos sean malos (pues al contrario, están muy bien elaborados y cada uno se enlaza perfectamente con el otro), sino porque al ser varios y al ocurrir de una forma tan rápida, llega el momento en que podría resultar fácil deducir el final de la trama, el cual si bien es más que interesante e incluso sorpresivo, para quienes sepan conectar las pistas resultaría un tanto predecible, pero de ninguna forma aburrido o simple.

En resumen, Searching es un asombroso thriller psicológico que si bien no presenta una historia nueva, tiene la ventaja de estar contada mediante las pantallas de celulares y computadoras, lo que de cierta forma la dota de un aire fresco respecto a las cintas de este género. Sin embargo, su mayor fortaleza radica en el suspenso que contiene, el cual y gracias a los distintos cambios de rumbo de su trama, la convierten en un producto no sólo envolvente, sino también siniestro debido a la angustia y desesperación que generan varias de sus situaciones.