“Leaving Neverland”, el documental que está derrocando a un ídolo
Ídolo de muchos, un monarca para legiones y hasta un fenómeno musical para otros más pero, aun así, considerado como un monstruo por otros tantos; así es la imagen que se la ha dado a Michael Jackson a través de los años, pues a pesar de su increíble talento su vida siempre estuvo rodeada de escándalos y rumores, aunque ninguno tan fuerte como aquel que lo señalaba como un pedófilo. Ahora, sean verdades o sean mentiras, el imperio de este músico parece derrumbarse poco a poco tras el estreno de Leaving Neverland, el documental que expone el lado oculto del llamado Rey del Pop.
Leaving Neverland se trata de un documental dirigido por Dan Reed y dividido en dos capítulos de dos horas cada uno, el cual tiene como protagonistas a dos presuntas víctimas –ahora adultas-, Wade Robson y Jimmy Safechuck, quienes relatan crudamente los supuestos abusos sexuales que sufrieron por parte de Michael Jackson cuando eran niños. Asimismo la investigación involucra a las madres de ambos, Joy Robson y Stephanie Safechuck, cuyas declaraciones y forma de contar los hechos dotan a esta obra con un toque aún más turbio al denostar cierta complicidad de su parte.
Ahora, más que hablar sobre lo que uno se encuentra al ver el documental producido por HBO y Channel 4, aquí expondremos algunos de los casos, medidas y hasta declaraciones más controversiales que se han tomado y dicho en contra – y a veces a favor- de la memoria de Jackson a raíz de que este proyecto salió a la luz.
Las declaraciones de la inocencia
La parte más cruda del documental para algunos son, sin lugar a dudas, las declaraciones de Jimmy y Wade, quienes tenían 5 y 7 años de edad cuando comenzaron a tener una vida privada –quizá demasiado privada e íntima- con la súper estrella del pop. Asimismo, ambos presentan declaraciones y pruebas que se consideran irrefutables en las acusaciones contra Jackson.
No obstante, a pesar de que en sus confesiones incluso dan lujo de detalle de las partes más íntimas del cuerpo del cantante, parte del internet ha explotado contra ambos hombres, pues no es raro encontrarse con comentarios en donde se les acusa de hacer declaraciones prefabricadas y falsas con tal de dañar la imagen del artista.
Asimismo, un aspecto que para algunos derrumba la credibilidad de Robson y Safechuck es que “dejaron pasar varios años” para revelar estos secretos, argumentando que seguramente lo hicieron por dinero; algo que, cabe mencionar, los dos hombres han dicho que no recibieron ni un solo centavo por su participación en el documental.
De esta forma, para cierto sector del público y fans del autor de «Thriller», las declaraciones de las víctimas no tienen validez alguna a pesar de que describen cosas como un presunto “sistema especial de campanillas” que alertaban a MJ cuando alguien se acercaba a su habitación, lo que le daba tiempo para vestirse cuando estaba con ellos; o como cuando declaran que llegó a proponerle matrimonio a uno de los dos y a quienes además pedía no contar nada a sus padres, pues Michael les aseguraba que los adultos no entenderían “su amor” y podrían ir todos a la cárcel.
Declaraciones como estas y otras descripciones con un contenido más sexual y explícito están presentes en este documental de prácticamente cuatro horas de duración; aunque como hemos dicho, no hay que buscar mucho en la red para encontrarse con internautas que apoyan o desestiman este tipo de revelaciones.
La complicidad familiar
Si los secretos revelados por las víctimas no fueran suficientes para erizar cualquier tipo de moral, quizá sí lo sean las declaraciones de las madres, quienes dan a entender que quizá lo peor no fue el no percatarse de lo que pasaba dentro de las paredes de Neverland, sino el no querer ver ni aceptar el peligro al que estaban expuestos sus hijos, pues en el fondo se infiere que la vida de lujos y comodidades con los que Jackson llenó a ambas familias pudieron más que el amor y la confianza.
Así, tanto las declaraciones de la señora Robson como Safechuck han ocasionado que ellas mismas sean vistas como cómplices en el abuso de sus hijos, pues ambas comentan que tal vez fueron las generosas dotaciones de vino y champagne, así como los viajes a Hawai o las cenas con Jackson, lo que les impedía (querer) darse cuenta del chantaje del que formaban parte.
Después de todo, una de ellas comenta ya sea a manera de justificación o de disculpa, que el sólo hecho de ser amigas de la estrella del pop más famosa de todos los tiempos era en sí una venda que o bien no les permitía mirar, o que quizá ellas mismas no querían arrancarse de los ojos.
Por mencionar algunos ejemplos de esta ceguera, Stephanie Safechuck comenta que durante las giras en los conciertos, en un inicio fue sospechoso el que su habitación de hotel quedara cada vez más alejada del cuarto que compartían Jackson y el pequeño Jimmy, pero en ese entonces a ella le bastaba un simple “no encontramos una suite más cercana para usted” para dar esto por hecho y no hacer más preguntas.
De igual forma, mientras a Safechuck le bastaban unas simples palabras para confiar, Joy Robson cuenta que incluso llegó a mudarse a Los Ángeles –dejando a su esposo e hijo mayor en Australia- con tal de estar lo más cerca de MJ que pudiera; tan así, que confiesa que hubo varias ocasiones en que sin importar lo temprano del día o lo alto de la noche, llevaba a su hijo Wade a Neverland cada vez que el creador del moonwalk lo solicitaba…a pesar de que cuando lo volvía a buscar, el personal del rancho parecía evitar que lo encontrara.
El asunto resulta más turbio cuando las familias confiesan que se sentían personal e íntimamente dañadas por Michael cuando éste parecía tener a “otro niño favorito” que no fuera el suyo. Sin embargo, para gran parte de los espectadores lo peor de todo no son las memorias de las madres de las víctimas, sino el hecho de que los ojos de estas se llenan con un brillo especial –casi nostálgico- y su rostro se ilumina con una sonrisa –prácticamente cariñosa- cuando frente a la cámara recuerdan su época dentro de Neverland; cuando reviven una vez más el tiempo en que Jackson fue feliz al lado de sus hijos (o tal vez a costa de ellos).
El ídolo que no permiten caer
Anteriormente comentamos el hecho de que sin importar qué tipo de declaraciones se hayan hecho en este documental, el Rey del Pop continúa teniendo un gran séquito de fanáticos, quienes independientemente de si las acusaciones son falsas o verdaderas, parecieran estar dispuestos a caer primero ellos antes que su gran ídolo.
Y por supuesto, quienes más duramente defienden al autor de “Bad” son sus representantes, quienes desde que supieron que dicho documental se estrenaría en la más reciente edición del Festival de Sundance, demandaron a HBO por haber producido y difundido este material.
Así, los defensores se refirieron a Living Neverland como “una nueva producción escabrosa y un patético intento de explotar y sacar ganancias de Michael Jackson», además de señalar que «Wade Robson y James Safechuck testificaron bajo juramento que Michael Jackson nunca hizo nada inapropiado hacia ellos. Safechuck y Robson, el último un autoproclamado ‘maestro de la decepción’, demandó a Michael Jackson’s Estate pidiendo millones de dólares. Ambas demandas fueron desestimadas».
Es decir, para los representantes de MJ las declaraciones de las presuntas víctimas no sólo son falsas, sino que éstas ya están desestimadas desde tiempo atrás y, por lo tanto, carecen de cualquier valor hoy en día; por lo que recalcaron que este documental “es solo otro refrito de acusaciones ya vencidas y desacreditadas. Es desconcertante que cualquier cineasta creíble se asociara con este proyecto«.
“Marge, creo que odio a Michael Jackson”
Volvemos a la premisa principal, ¿son o no son verdad todas estas acusaciones contra el Rey del Pop? Esa es una cuestión que cada uno de nosotros debemos responder –y creer o no creer-, pero fuera de eso, lo que sí es verdad es que varias emisoras de radio y algunos programas de televisión ya han tomado una decisión.
De esta manera, en Nueva Zelanda las emisoras de radio RNZ, NZME y el grupo mediático MediaWorks optaron por sacar del aire todas las canciones interpretadas por Michael Jackson; al igual que la cadena CKOI y las emisoras Rythme y The Beat, en Canadá. Asimismo la Cogeco Media, también canadiense, decidió tomar la misma medida.
Lo curioso, es que algunas de ellas comentan que esta elección no está influenciada (o al menos no tanto) por la controversia de Leaving Neverland, sino que conforme a lo estipulado en sus reglas deben ajustar su programación a lo que la mayoría de los radioescuchas quieren oír…y al parecer en estos momentos canciones como“Billy Jean”, “Smooth Criminal” o “Beat It” no están entre las favoritas de los oyentes.
Otra celebridad que ha al parecer ha elegido un bando es la famosa, influyente y respetada Oprah Winfrey, quien declaró que “Durante la emisión de mi programa grabé 217 episodios sobre abuso sexual. Ahora Reed pudo ilustrar en estas cuatro horas (del documental) lo que yo intenté explicar en 217 episodios”.
A pesar de esto el caso más sonado sobre las medidas que se han tomado en contra de Michael Jackson es el de Los Simpson –una serie que quizá en otro tiempo y en otras temporadas habría satirizado esta situación en vez de omitirla-, pues de acuerdo con el diario The Wall Street Journal, el programa de la familia amarilla retirará de su programación por tv y streaming el capítulo “Stark Raving Dad” (1991), donde la voz de MJ es usada para el personaje de Leon Kompowsky, un paciente de un psiquiátrico que dice ser el mismo Rey del Pop.
Respecto a esto James L. Brooks, productor ejecutivo de Los Simpson, aseguró que la decisión de retirar el capítulo “parece ser la única opción”, pero además fue una elección en la que estuvo de acuerdo todo el equipo.
El silencio familiar
Aunque el escándalo ha sido bastante grande a raíz del estreno del documental, la familia de Michael Jackson ha mantenido un perfil bajo sobre estas declaraciones, pues hasta el momento sólo su hija Paris y su sobrino Taj Jackson se han manifestado al respecto. La primera sólo ha dicho de manera directa que prefiere mantener la cabeza fría frente a este asunto, mientras que el segundo asegura que si Michael estuviera vivo estaría “llorando” por escuchar tales cosas en su contra.
Por último es importante resaltar que si bien Leaving Neverland es un documental que seguramente dividirá opiniones entre los fanáticos, lo cierto es que se trata de un proyecto que no da una respuesta concreta sobre si el cantante violó o no a algún niño, sino que simplemente presenta las pruebas y las confesiones necesarias para que el espectador saque sus propias deducciones y conclusiones; aunque para algunos lo más lamentable de esto es que este material llega cuando ya no hay una voz que pueda defenderse de tales acusaciones.