“Ainbo” (2021): el regreso de la animación peruana

Ainbo es una chica nativa de la Amazonía que vivirá la aventura más grande de su vida. Privilegiada con los poderes místicos de la selva, recibe la guía de dos espíritus que la acompañarán en diversas pruebas. Todo con el objetivo principal de evitar la destrucción del lugar donde vive y liberarlo de toda presencia maligna.
Como es bien sabido, la animación es un trabajo arduo, y más aún si se trata de producciones en esta parte del mundo. En el caso particular de esta película, su realización tomó varios años y fue gracias al apoyo del extranjero que finalmente pudo concretarse. Ya antes en el Perú se habían dado algunos intentos de cine animado, desde los primeros pasos con Piratas del Callao (2005), El delfín: la historia de un soñador (2009) o, más recientemente, Condorito: La película (2017). Ahora le ha tocado el turno a Ainbo, que desde su concepción tiene un objetivo claro: mostrar la belleza de la selva y la importancia de su preservación.
La cinta sigue una narrativa común en varios clásicos infantiles —la influencia de Disney es muy notoria— en la que vemos cómo la protagonista se va descubriendo a sí misma a lo largo de su viaje. Se nota un buen conocimiento de la mitología que rodea el entorno amazónico, lo que permite que el filme sea culturalmente respetuoso. No llega al punto de parecer un documental, pero está dentro de los márgenes de comprensión de su público objetivo.
Esto último es importante, ya que resulta evidente que no es una película dirigida a un público como quien escribe. Por supuesto, eso no es excusa para ser condescendiente. Incluso siendo una obra para niños, podría haber ofrecido algo más al espectador adulto, y este no es el caso. No logra escapar de muchos clichés ni de situaciones “cómicas” que no provocan gracia, llegando a una resolución extremadamente convencional.
En cuanto al aspecto técnico, a pesar de ciertas fallas en la animación —como los movimientos poco fluidos de los personajes—, visualmente Ainbo resulta atractiva. Usa una amplia gama de colores vistosos para ofrecer un retrato llamativo de la selva, y logra diferenciar claramente los roles de cada personaje.
En conclusión, Ainbo es un nuevo intento por hacer animación en el Perú que, si bien supera a sus predecesores en algunos aspectos, no termina de ser una obra redonda por fallas evidentes. Aun así, es una propuesta ideal para el público infantil, que sin duda podría quedar maravillado con el colorido mundo visual que presenta.