Ready Player One asombra a críticos en su debut: dicen que es un clásico instantáneo

- Por

El debut de Ready Player One, de Steven Spielberg, el once de marzo pasado en el Festival South By South West (SXSW) dejó francamente impresionada a la crítica y a los asistentes, quienes la calificaron como un clásico instantáneo. A pesar del escepticismo que había alrededor del film, su primera aparición en pantalla ha demostrado que a Spielberg, nunca de los nuncas, se le debe subestimar.

Spielberg es quizá uno de los directores más importantes del cine comercial de los últimos cuarenta años; de hecho, fue él quien le dio forma al Hollywood que conocemos hoy. Después de varios años de dirigir épicas históricas (Lincoln, War Horse, incluso The Post) regresa al género que catapultó su carrera: la ciencia ficción.

Basada en la novela del mismo nombre de Ernest Cline (quien además colabora en el guion) Ready Player One está situada en el año 2045, en un yermo Columbus, Ohio; un distópico mundo dividido en dos: la gris realidad, y el imponente mundo digital de Osasis.

Este mundo de realidad virtual, en donde todos viven disfrutando de sus infinitas posibilidades, fue diseñado por un genio de la informática ya muerto: James Halliday; y permite a quien ingresa a él no sólo realizar proezas imposibles, sino convivir con personajes de la cultura popular ochentera, que el propio Halliday insertó en ese mundo: King Kong, Batman, los Transformers (a modo, desde luego, de guiño a otras películas de Spielberg).

Wade Watts, un huérfano que explora el Oasis bajo el pseudónimo de Parzival, es acompañado en sus aventuras por su mejor amiga Aech; y aunque ambos nunca se han conocido en la vida real, no lo necesitan, pues toda la vida social, sus vicisitudes y premios, están ya insertos en Oasis.

Entonces Halliday, una especie de Willy Wonka futurista, anuncia que ha escondido una llave secreta, un easter egg, en los confines de Oasis, y quien quiera que lo tenga será dueño de todas las acciones de su compañía: una fortuna. Parzival, Aech, y una larga fila de hard core gamers se enfilan a una furiosa contienda por encontrar la llave. En el camino se enfrentarán unos contra otros, y contra un muy fuerte enemigo: Nolan, un militar que ha formado todo un ejército para encontrar la llave antes que todos.

Aunque Spielberg no se presentó a la alfombra roja de la premier, sorprendió a los espectadores cuando se subió al escenario a presentar la película personalmente: “Yo no sabía que esta película se iba a convertir en una especie de álbum de la vanidad de mis otras películas. En realidad, está súper cargada de referencias culturales que le hablarán tanto a los gamers, como a los entusiastas del cine. Este no es sólo un film el que hemos hecho, es, se los prometo, una película”, declaró con pasión el realizador.

Horas después, ya en entrevista, Spielberg reconoció que los guiños a otros filmes, a video juegos, a toda la cultura popular ochentera, son tantos, que podrían ser un distractor para el espectador: “Yo he sido un gamer desde que en 1974 me puse a jugar por primera vez Pong. Quisimos llenar la película de pequeños homenajes a estos dos mundos, el del cine y los videojuegos. Está King Kong, los X Men, Jurassic Park, tú nómbralo. Sólo hay que recordar una cosa: todos esos guiños son ventanas, referencias, pero la historia de la película sigue adelante, y si miras hacia adelante podrás ver de qué trata en realidad la película”.

Los críticos la han calificado como “cautivadora”, “divertida”, “el más grande pretexto para explotar al máximo los efectos visuales y la animación digital”; “una visión precisa del mundo por venir, y de la nostalgia que nos define hoy”.

De ser esto verdad podríamos estar ante una de los grandes blockbusters de este año, uno que estará para competir con las más grandes producciones de todo el 2018. Ready Player One, protagonizada por Tye Sheridan, Ben Mendelsohn y Olivia Cooke, se estrenará en cines mundiales el 28 de marzo.